Rojo y Negro - Denise Pérez

Rojo y negro es una novela francesa de Henri Beyle, más conocido por su seudónimo Stendhal. Incluye la fuerza, la pasión y la espontaneidad y analiza la sociedad de fines de la Edad Media a través de la mirada de sus personajes. Ellos se descubren a sí mismos a medida que avanzan en su vida por sus ambiciones. En cuanto a recursos y técnicas de estilo, pude señalar estas: En lo narrativo, el novelista adopta la figura de narrador en tercera persona.
‘’El lector quizás esté un tanto sorprendido por este tono libre y casi amistoso: hemos olvidado decirle que el marqués llevaba seis semanas encerrado en sus habitaciones a consecuencia de un ataque de gita.’’
Las descripciones de ambientes y personajes, adquieren un papel predominante: son realistas ya que describen la realidad tal cual es. El estilo tiende a la sobriedad.
‘’Era la señora de Renal una de esas provincianas a quienes se suele tomar por necias los quince días primeros que se les trata. Dotadas de un alma delicada y deseosa a la par, el instituto de dicha, que es natural a todos los seres, hacía que nunca, o casi nunca, prestase la menor atención a las acciones de los personajes groseros en cuyo circulo la arrojara el azar’’.
En los diálogos, la lengua se adapta a la clase social de los personajes que la utilizan: la burguesía o la nobleza en decadencia.
(…)El signor Giovannone, director de San Carlos, me oyó cantar. Yo tenía dieciséis años. ‘’Este chico es un tesoro (dijo). ¿Quieres que te contrate?’’, vino a preguntarme. ‘’¿Cuánto me va usted a dar?’’ ‘’Cuarenta ducados al mes.’’ Señores, ¡Son ciento veinte francos! Vi el cielo abierto. ‘’¿Pero cómo lograré (dije a Giovannone) que me deje salir el signor Zingarelli?’’ ‘’Lascia fare a me.’’
La trama se desarrolla en la Francia del siglo XIX durante la década de los treinta, y se relaciona en torno a las ambiciones de un joven para ascender sobre la pobreza de su nacimiento, llamado Julian Sorel.

Julián Sorel es hijo de un carpintero miserable que lo detesta. Sin embargo, recibe educación en la iglesia y se hace gran lector. Julián entra a trabajar como preceptor de lo hijos del Señor de Renal (intendente de Verrieres).

Las características principales que pude notar en él, son la hipocresía, la ambición, el temor a ser humillado y el alma pura. La hipocrecía por que esta es su principal arma para triunfar en la sociedad, ya que se trata de una época en que la cortesía es un valor absolutamente estimado, además, debemos recordar que Julián tiene pensamientos liberales y esta viviendo en la época de reforma católica, por lo tanto, si quiere triunfar, debe callar sus opiniones (por ejemplo, su amor por Napoleón, ya que tanto el marqués como el intendente lo odian, también esta característica es usada en el uso del negro, el hábito que elige Julián para ascender socialmente, sospecho que no refleja una vocación religiosa, sino que es un disfraz para poder ascender socialmente) En la gruta, el protagonista admite que es hipócrita con todo el mundo, incluso con su gran amigo Fouqué. Sólo encuentra el momento de sincera libertad en ese lugar y una vez que es condenado a muerte. Sin embargo, Julián es demasiado único para triunfar mediante la hipocresía, se destaca demasiado. Esto le ocurre desde un principio en el seminario. Fracasa en su intento de satisfacer a la sociedad mediante la hipocresía.

“se le ocurrió la idea de entregarse al placer de escribir sus pensamientos (…) se dijo: (…) soy libre (…) su hipocresía no le permitía ser libre”
La ambición es por que ya desde muchacho, Julián tiene bien en claro cuáles son sus metas en la vida: triunfar en la sociedad, conseguir dignidad, distinción, respeto y dinero para vivir noblemente. De esta manera, idea planes constantemente para alcanzar sus objetivos. Reflexiona lógicamente, con la frialdad y el cálculo. El temor a ser humillado se ve constantemente en la obra. En casa De Renal, teme comer con los sirvientes y odia los desplantes del intendente. En el seminario se cuida mucho de los complots de sus compañeros. En la casa de La Mole, el temor a ser humillado es constante. El marqués lo sabe, lo que más teme Julián es el rechazo. Cuanto más asciende Julián, más se acrecienta su temor de verse humillado, ya que la caída sería más grande. Este temor lo lleva a los bordes de la locura. Incluso, cuando está por morir, no se preocupa por su final, sino por no parecer asustado en ese momento.

‘’ ‘’¿Estos dos jovenes tan amables habrán intentado burlarse de mí? Preciso es confesar que esto es mucho más probable, mucho más natural que una pretendida pasión de la Señorita de La Mole por un pobre diablo de secretario. En primer lugar, ¿tienen pasiones esas gentes? Su fuerte es engañar. Están celosos de mi pobre superioridad de palabra. Los celos son también unos de sus flacos. Todo se explica en este sistema. La Señorita de la Mole quiere convencerme de que me distingue con su predilección sólo para ofrecerme en espectáculo a su pretendiente.’’ Esta cruel sospecha cambió la situación moral de Julián.’’

‘’ ‘’Hay que renunciar a todo esto –se dijo- antes que rebajarze a comer con los criados. Mi padre querrá obligarme a aceptar, pero antes la muerte. Tengo quince francos y cuarenta céntimos de economías; me escapo esta noche; en dos días, yendo por atajos donde no corro peligro de encontrar ningún con gendarme, estaré en Besancon, allí me alisto como soldado y, si es preciso, me voy a Suiza. Pero entonces ya no habrá para mí ambiciones ni éxitos, ni esa hermosa carrera eclesiática que lleva a todas partes.’’ ‘’

Y por último, la alma de Julián es destacada por que el personaje tiene una voluntad fuerte y una gran energía que lo mueve no común en su época. Esta energía con la pasión entra con su mente lógica. Julián tiene un corazón apasionado. Se enamora de Madame de Renal y de Matilde siendo un seminarista. Cuando lo ofenden en París, intenta llevar a cabo un duelo. Esta pasión incontrolable lo irá llevando hacia su fin. Tiene su punto grave con el intento de asesinato a Madame de Renal. Cuando está en la cárcel e intenta reflexionar razonadamente sobre su crimen, se pone de manifiesto que este acto es producto de un alma de fuego.

‘’Julián, que la tenpia sujeta con pasión y resistía a sus esfuerzos spor desasirse de él, dejó de estrecharla entre sus brazos. (…) El hecho de haberse negado a aceptar el tuteo, aquella manera brusca de romper un brazo tan dulce y que para él todavía existía enter ellos, llevaron al delírio el arrebato amoroso de Julián. -¿Pero es posible que ya no me ames?- le dijo en esos arranques de pasión que tan difícil es escuchar a sangre fría. Ella no respondió; él lloraba amargamente. En realidad, no podía hablar. -¡De modo que la única persona que me ha querido en toda mi vida me ha olvidado por completo! ¿Para que vivir ya? Todo su valor le había abandonado desde el momento en el que ya no tubo el peligro de tener que encontrarse con un hombre. Todo había desaparecido de su corazón menos el amor. Lloró mucho tiempo en silencio. Le cogió la mano. Ella quiso retirarla, pero después de algunos movimientos convulsivos la abandonó.’’

El Señor De Renal es el alcalde de Verrieres. Tiene una gran influencia en París. Es un ser respetable en toda Francia, con voluntad despótica. Nunca tubo una relación de verdadero amor con su esposa, no es un hombre muy apegado a su familia. Es necio y sin un solo amigo.

Julián se enamora de Madame de Renal. La Señora de Renal es una joven rica madre de tres hijos. Esta enamorada profundamente de Julian, tiene valores claros que no posee cualquier mujer. Es extremandamente religiosa. Tiene un corazón de oro, era una dama delicada y con unos ojos que podrían transmitirle amor a cualquiera. No quería a su marido, los únicos hombres de su vida eran Julián en primer lugar, y luego sus hijos.

‘’Era la señora de Renal una de esas provincianas a quienes se suele tomar por necias los quince días primeros que se les trata. Dotadas de un alma delicada y deseosa a la par, el instituto de dicha, que es natural a todos los seres, hacía que nunca, o casi nunca, prestase la menor atención a las acciones de los personajes groseros en cuyo circulo la arrojara el azar.’’

‘’Aquella mujer sencilla pasaba por momentos de autentica agitación interior; no cabía dudarlo. Una expresión de violencia, de cólera, mejor dicho, alteraba esa especie de placidez serena que se sobrepone a los intereses vulgares de la vida(...)Todo ello parecía revelar a Julián facultades de su alma que él no había sentido jamás.’’

‘’ La señora de Rênal, admiradora entusiasta de su genio y enamorada de su belleza física. Creyó morir al escuchar las palabras de Julián, que dejaban entrever muy a las claras la posibilidad de que renunciara a continuar siendo el preceptor de sus hijos’’

‘’ Con sagacidad maravillosa buscaba las ideas que consideraba más a propósito para encauzar la cólera ciega de su marido.’’

‘’ En el corazón de la señora de Rênal despertó con bríos el sentimiento del peligro al entrar en sus habitaciones y ver saltadas las cerraduras de todos sus muebles y cofrecitos y levantadas no pocas baldosas.’’

Tienen relaciones amorosas. Fouqué, su amigo burgués advenedizo, le ofrece hacerlo partícipe de su negocio, Julián lo rechaza. El Señor de Renal recibe cartas sobre el engaño de su esposa. Julián Sorel deja la casa de los Renal para continuar con su carrera religiosa (a pesar de que extraña a esta mujer y de que ella está perdidamente enamorada de él).
Va a un seminario en Besancon. Allí se destaca, pero el resto de sus compañeros lo odian y envidian. Consigue la protección del director del seminario: el padre Pirard (un jansenista, es decir, un hombre enfrentado a los conservadores dentro de la Iglesia). Pirard le consigue un puesto como secretario de un marqués en París. Antes de partir hacia la gran ciudad, Julián vuelve a la casa de Renal y consigue entrar sin ser visto. Se reencuentra con Madame de Renal y pasan juntos un hermoso día, encerrados en la habitación.
Julián entra a trabajar como secretario del marqués de La Mole. El marqués tiene dos hijos: un varón y una mujer: Norberto y Matilde.
Matilde es una muchacha inteligente, histérica, que adora leer. Es muy hermosa y en los salones todos tratan de cortejarla. Ella se enamora de él, pero intenta esconder este sentimiento por la distancia social que los separa. Julián empieza a frecuentar salones, logra destacarse a pesar de su humilde condición entre los nobles que se hallan en esos lugares. Se gana el respeto en la casa de La Mole y la amistad del marqués. Matilde se le insinúa y él se “enamora” de ella. Entonces, ella se desenamora porque le resulta algo muy fácil. Ella admira los amores antiguos entre reinas y guerreros, los amores imposibles. Empieza a mostrar desprecio por Julián. Sus padres arreglan un casamiento futuro entre ella y un gran noble de Paris. Julián sufre mucho. El marqués, quien –por supuesto- ignora todo esto, le encarga a Julián una misión relacionada con un complot que organizan los nobles más importantes de París para aliarse con otros nobles de Europa. Julián la cumple y en esa misión encuentra a un príncipe ruso que le da consejos para reconquistar a Matilde. Julián vuelve a París y sigue estas recomendaciones. Matilde vuelve a enamorarse de él. Julián trata de fingir, sin embargo, que no está enamorado de ella, para que la muchacha siga interesada en él. Conversan sobre filósofos, etc. Comienzan a tener relaciones sexuales. Ella queda embarazada. Se lo comunican al marqués quien revienta de furia, debido a la diferencia de clases sociales y a la deshonra que implica para su familia. Ella está locamente enamorada de él y se dispone a hacer cualquier cosa con tal de permanecer a su lado, casarse y tener un hijo. Cuando la pareja está a punto de ver sus sueños cumplidos le darían a Julián un apellido ilustre, fingiéndole una descendencia, una renta anual y un título de teniente; La Mole recibe una carta de Madame de Renal en la que le cuenta acerca de cómo fue seducida por Julián, y lo persuade para que rechace a este joven como su yerno, debido a que se trata de un burgués que sólo quiere ascender socialmente. La Mole anula los preparativos para el casamiento de su hija y Sorel. Julián, inesperadamente, se dirige a Verrieres, compra un arma, y en misa dispara dos tiros a Madame de Renal. Lo apresan y lo llevan a la cárcel. La mujer, no obstante, no muere, sólo está herida. En la cárcel, Julián recibe las visitas diarias de Fouqué y Matilde. Unos días después aparece Madame de Renal. El joven siente que la ama (y sólo la ha amado a ella) y le pide disculpas. Ella se disculpa, asimismo, por haber copiado y enviado la carta que su director espiritual le escribió (la que recibe La Mole). Ambos se sienten felices de estar juntos otra vez. Sin embargo, la situación de Julián no es sencilla: va a tener un hijo con Matilde y a ser ejecutado por intento de asesinato premeditado. Sin embargo, sólo piensa en Madame de Renal. El juicio se acerca, Julián quiere que lo ejecuten. Matilde intenta por todos los medios manipular el juicio para que lo absuelvan. Julián hace prometer a su amada y a la madre de su hijo (quien ahora sí está apasionadamente enamorada de él) que no se suicidarán cuando lo vean muerto. El jurado declara culpable a Julián, quien no hace nada por defenderse y, por primera vez en su vida, habla con sinceridad ante un gran público. Julián es ejecutado. Lo entierran en una gruta que él había conocido durante un viaje a casa de su amigo Fouqué. Matilde se encarga de todos los procesos fúnebres. Tres días después de la ejecución de Julián, Madame de Renal muere de muerte súbita abrazando a sus hijos.

El tema que quise tratar es cómo esta reflejado el principio y el fin de todo ser que quiere ascender socialmente cueste lo que cueste, usando la hipocresía y a las personas. Mi conclusión es que, sacando el detalle que llevo a la perdición a Julián, que fueron sus cualidades no presentes en varias personas, que no permitieron que pase desapercibido, la ambición y ocultar como uno es realmente nunca conducen a nada.