La relación con su padre.
“El Curioso Incidente del perro a medianoche” es una curiosa novela acerca de un niño llamado Christopher Boone, quien padece de Síndrome de Asperger. A pesar de su gran capacidad e inteligencia para las matemáticas, Christopher es incapaz de relacionarse socialmente con las personas, porque una de las características principales de su enfermedad es ésta. Además no le gusta lo desconocido, ni el contacto físico con las personas. Los padres de un niño que tiene este trastorno neuromental deben tener mucha paciencia y conocer demasiado tanto a su hijo como a la enfermedad que padece, para evitar disgustos. “Cuando me di cuenta de que no compartía juegos, me preocupé. Se supone que a partir de los dos años, por crecimiento sicológico, los niños son capaces de entretenerse con otros. Cuando nació mi segunda hija, vi la diferencia abismante y me puse en alerta. Aparecieron otros signos como fobias, obsesiones, rutinas" dijo Isabel Ibacache, madre de niño de 15 años de edad que padece Asperger. El padre de Christopher conoce muy bien a su hijo, e intenta evitar todas las cosas que podrían llegar a hacerlo sentir mal, así como también aplica las cosas que a su hijo le gustan. “Levanto la mano derecha y abrió los dedos formando un abanico. Yo levante la mano izquierda y abrí los dedos formando un abanico e hicimos que nuestros dedos se tocaran. Hacemos eso porque a veces Padre quiere abrazarme, pero como a mí no me gustan los abrazos, hacemos eso en su lugar”. Pero el conocimiento y la paciencia de su padre hacia Christopher fue la causa principal por la que su madre abandono la casa, yéndose a vivir a Londres con el Senior Shears, ex esposo de la Señora Shears, que era una vecina de Christopher. Esto no quiere decir que la madre de Christopher haya sido una mala madre, sino que era diferente a su padre, y no tenia el mismo trato y la misma facilidad de relacionarse con su hijo, así como su padre la tenia. “Yo no soy como tu padre. Tu padre es una persona mucho más paciente y acepta las cosas como son y si alguna cosa le altera no lo demuestra. Pero yo no soy así, y no puedo hacer nada por cambiar eso”. Pero así es como, en un acto de ira, debido a que su esposa y madre de Christopher los había abandonado y lo había cambiado por el Senior Shears, el padre de Christopher mato a Wellington, el perro de la Señora Shears. Además porque la Señora Shears y el padre de Christopher eran amigos, pero por lo sucedido con su esposa, decidió cortar la amistad con la Señora Shears. Pero no se dio cuenta de que esa noche, Christopher andaba por el vecindario y vio al perro. Quiso saber insistentemente quien lo había matado, y así emprendió la búsqueda de quien había sido capaz de matar a un animal tan inocente como lo era un perro para el. Debido a la deficiencia de Christopher, esto le llevo bastante tiempo, y descubrió muchas cosas nuevas acerca de su padre. Pero uno de los problemas del padre de Christopher es que era demasiado cuidadoso y casi sobre protector de su hijo. “Cayó sobre mí una gran angustia, una sensación de desprotección, de mi niño, inmensa. Algo que nunca había sentido por mis hijos menores. Supe que estaba indefenso. Que era transparente, manipulable, frágil socialmente" cuenta otra madre de un niño con este síndrome. Al enterarse de una noticia como esta, los padres de niños con este problema quedan devastados, sin saber que hacer, y siendo vulnerables a sus propios hijos, ya que terminan sin saber como tratarlos, si normalmente, o de una manera especial. Y esto hizo que le mienta a Christopher sobre la muerte de su madre. Como su madre se había ido, el padre no sabia como iba a reaccionar Christopher si le contaba la verdad acerca de lo sucedido, o si iba a entenderlo, por eso decidió decirle que su madre había muerto. “Madre solo tenia 38 años y los ataques al corazón suele tenerlos la gente mayor, y Madre era muy activa y montaba en su bicicleta, y comía una comida sana, con mucha fibra”. Y como Christopher sabia que su padre no le mentiría nunca, porque el no lo soportaría, decidió creerle. Christopher no dudo de su padre por esa noticia, sino porque el sabia lo que era un ataque al corazón, y por eso lo relaciono con una aneurisma, dándole poca importancia al tema de su madre en si. Entonces, en las páginas siguientes, la búsqueda del asesino de Wellington queda en un plano secundario cuando Christopher descubre y entiende, lentamente, la clase de persona que era su Padre, narrando los hechos que lo llevan a descubrir la mentira, la misma que lleva a Christopher a enojarse con su padre e irse con su madre, no pudiendo entenderlo, por mas difícil que fuera, debido a su problema. “Si bien a estos niños les cuesta exteriorizar sentimientos, pueden llegar a confiar plenamente en alguien o, por el contrario, a ignorarlo para siempre si éste les hace daño.” Cuenta un reportaje aparecido en el Diario Mercurio de Santiago, Junio de 2002.
Christopher nunca hablaba con extraños, a no ser por necesidad. Por eso cuando emprendió la búsqueda del asesino de Wellington, hablo con algunas personas de su vecindario, haciendo de detective, pero nunca relacionándose con nadie nada mas que su padre. Pero la Señora Alexander le dijo a Christopher que el Senior Shears había engañado a su esposo con su madre, y por eso se fueron de la ciudad. Christopher no tuvo ninguna reacción ante esta noticia. “Pero no estoy triste, porque Madre esta muerta. Y porque el Senior Shears ya no anda por aquí. O sea que estaría poniéndome triste por algo que no es real y no existe. Y eso seria estupido”.
El Padre de Christopher escondió el libro que estaba escribiendo Christopher acerca de la búsqueda del asesino de Wellington, diciéndole que no se entrometa en la vida de los demás. A veces el propio padre de Christopher perdía los estribos al ver las incapacidades de su hijo. “Padre nunca me había agarrado de esa manera. Madre me había pegado algunas veces porque era una persona muy irascible. Pero Padre es una persona mas equilibrada, lo que significa que no se enfada tan rápido y no grita tan a menudo. Asíque me sorprendió mucho que me agarrara.” Pero Cristopher era muy insistente con el caso. “Quería recuperar mi libro porque me gustaba escribirlo. Me gustaba tener
un proyecto en marcha y me gustaba especialmente que fuera un proyecto difícil como un libro”. Un padre común como todos, teniendo un hijo que tiene Síndrome de Asperger, hubiese gozado de ver como su hijo se empeñaba en escribir un libro, ya que en la actualidad, muchos de estos niños hoy son profesionales o están en la universidad. El Padre de Christopher no quería que el escriba el libro por el simple hecho de que tenia miedo que su hijo descubriera las cosas que habían sucedido, y porque, claramente, no quería que se entere que el había matado a Wellington. El sabía cuales iban a ser las consecuencias si su hijo se enteraba de que el asesino del perro había sido su propio padre. Pero nunca llego a imaginarse que Christopher reaccionaria yéndose de su casa, a vivir con su madre, porque su padre era el que lo cuidaba a diario, y no su madre, que había decidido alejarse porque encontraba difícil relacionarse con su hijo.
Cuando Christopher leyó las cartas y pudo entender que su madre no estaba muerta, claramente su padre pasó a ser una persona mas, como todas. “Supe que el estaba en la habitación, pero su voz sonaba débil y lejana, como suenan a veces las voces de la gente cuando yo estoy gimiendo y no quiero que estén cerca de mi”. El miedo que sentía Christopher era razonable y lógico. Una persona como su padre nunca le mentía, y a pesar de las consecuencias y de la enfermedad de por medio, habían logrado una relación en base a la confianza y la protección, y este suceso se había convertido en una mera traición para el, implicando deslealtad. Pero una persona común hubiese entendido, o por lo menos intentado entender, y pedir explicaciones acerca de una mentira como esa, no huir de los hechos. Por esto mismo era que la relación entre Christopher y su padre era muy importante: no era fácil interactuar con un niño que presentaba una o más discapacidades, diferente a los demás niños de su edad. Y más todavía siendo un infante como lo era Christopher.
El padre de Christopher había quedado atontado, sin saber que decir ni como actuar, porque la situación lo había tomado de sorpresa, y porque sabía que a pesar de cualquier explicación que le diera a Christopher, los resultados iban a ser paupérrimos. “Lo hice por tu bien Christopher, de verdad que si. Nunca pretendí mentirte. Tan solo pensé que… Tan solo pensé que era mejor que no supieras… que… que… Yo no quería… Iba a enseñártelo cuando fueras mayor”. El padre de Christopher era una persona vulnerable, y se dejo llevar por el hecho de que su esposa lo había engañado, se marcho y los abandono. No solamente por eso el actúo de esa manera, sino porque al marcharse la madre de Christopher, el iba a quedar a cargo por completo de su hijo, que no era como todos, y necesitaba de una atención y protección constante. El pensó que seria mejor de esa manera. “Yo no sabia que decir… Estaba tan hecho polvo… Ella dejo una nota y… entonces llamo por teléfono y…”. Pero Christopher no le hablaba. Entonces su padre pensó que seria mejor confesarle que el había matado a Wellington, porque quedaba en juego su reputación en frente de su hijo. Y porque el no quería mas mentiras entre ellos. “Mira, a lo mejor no debería decirte esto, pero… quiero que sepas que puedes confiar en mi. Y a lo mejor no digo siempre la verdad. Dios sabe que lo intento, Christopher, la vida es difícil, ya lo sabes. Es durísimo decir la verdad todo el tiempo […] Yo mate a Wellington, Christopher.” Fue así como Cristopher entendió por completo todo lo que le había dicho su padre, y se sintió extraño y temeroso hacia el.
No quería estar cerca de su padre porque el asociaba la muerte de Wellington, el perro, con que el perjudicado podría haber sido también una persona, o con el mismo. Pero eso era imposible porque el padre de Christopher amaba a su hijo. Solamente se había dejado llevar, y había hecho que las cosas llegaran muy lejos. “Todos cometemos errores, Christopher. Tu, yo, tu mama, todo el mundo. Y a veces son errores verdaderamente grandes. Solo somos humanos.”
“Tenia que salir de casa. Padre había matado a Wellington”. Lo que menos hubiese imaginado el padre de Christopher, era que su hijo con síndrome de Asperger, teniendo la discapacidad propiamente dicha, hubiese sido capaz de irse de su casa completamente solo. Christopher no sabia adonde ir, cuando decidió irse con su madre. Esta fue una mala decisión de parte de Christopher, ya que su madre lo había dejado solo con su padre y se había ido a vivir muy lejos, solo por el hecho de que no sabía como relacionarse con su hijo, y sentía que su padre lo cuidaba mejor que ella, y que ambos tenían mas afinidad. Como ella sintió que estaba demás y que hacia las cosas mal, entonces decidió alejarse. Y alejarse no es la solución para los problemas, tampoco abandonar a un hijo. Pero Christopher no tenia la madurez y capacidad suficiente para analizar esto, y no tuvo en cuenta todas las cosas que su padre hizo por el. Pero, claramente, esta es una de las consecuencias del Síndrome de Asperger en los niños, y esta misma consecuencia se ve en los padres, obligándolos a veces a actuar de forma incorrecta, o guiándose inconcientemente por el miedo, tal como hizo el padre de Christopher; Aunque lo mismo hizo Christopher con su padre, guiándose por el miedo y no pudiendo confiar en el. Y así se fue de su casa.
Cuado el padre de Christopher se dio cuenta de que su hijo se había ido, hizo lo que sea por buscarlo. Su hijo estaba en la casa de su madre, en Londres. Los niños con síndrome de Asperger necesitan sentirse protegidos. Christopher sentía que su padre había violado su confianza, y ahora debía refugiarse, para sentirse protegido bajo los brazos de su madre. La madre de Christopher no era como su padre, no tenía la serenidad ni el esmero que tenia su padre en los distintos aspectos que abarcaban el cuidado de su hijo. Un día, Christopher había desaparecido. Estaba entre el contenedor y la furgoneta Ford Transit de la casa de su madre, porque ese lugar lo hacia sentirse tranquilo. “Si haces eso otra vez, te lo juro por Dios, Christopher… te quiero, pero… no se lo que haría.”
La madre de Christopher estaba feliz de haber vuelto a ver a su hijo. Pero su padre, desesperado por encontrarlo, lo que menos quería era que este con su
madre. No solo porque los había abandonado, tanto a el como a Christopher, sino también porque todavía seguía enojado con su ex esposa debido a su traición. El padre de Christopher no tiene la capacidad de afrontar la infidelidad de su mujer, lo que lo lleva a errar y casi perder la relación con su propio hijo.
Cuando Christopher por fin pudo dar el examen de bachiller en matemáticas, su padre estaba muy orgulloso de el, porque a pesar de su problema, y de todos los problemas que habían tenido, su hijo pudo hacer lo que mas le gustaba y deseaba hacer. “Estoy muy orgulloso de ti, Christopher. Muy orgulloso. Estoy seguro de que lo has hecho muy bien”. Para el padre era un logro muy grande hablar con su hijo en ese momento. Christopher solo hablaba con su padre porque su madre se lo pedía, pero el en realidad lo hacia porque sabia que, con la presencia de su madre, su padre no iba a poder hacerle daño. “Madre no volvía del trabajo hasta las 17.30 o sea que tenia que irme a casa de padre entre las 15.39 y las 17.30, porque no se me permitía estar solo y Madre dijo que no tenia elección, asíque colocaba la cama contra a puerta por si Padre trataba de entrar. Y a veces trataba de hablarme a través de la puerta, pero yo no le contestaba. Y otras veces lo oía sentarse en el suelo al otro lado de la puerta, en silencio, durante mucho rato”. Su padre estaba realmente arrepentido, y no quería perder a su hijo por el error que había cometido. “Christopher, mira… Las cosas no pueden seguir así. No se a ti, pero a mi esto… esto simplemente me duele demasiado. Lo de que tu estés en casa pero te niegues a hablar conmigo… Tienes que aprender a confiar en mí… Y no me importa cuanto tiempo haga falta […] Porque esto es más importante que cualquier otra cosa. Digamos que es… un proyecto. Un proyecto que tenemos que hacer juntos. Tú tienes que pasar más tiempo conmigo. Y yo… yo tengo que demostrarte que puedes confiar en mí. Y al principio será difícil porque es un proyecto difícil. Pero cada vez será mejor. Te lo prometo. No tienes que decir nada ahora mismo, no. Solo tienes que pensar en ello. Y… tengo un regalo. Para demostrarte que estoy hablando en serio. Y para decirte que lo siento”. Su padre le regaló un perro. “Ya veras lo que quiero decir”. Christopher de a poco entendió el significado del regalo, y lo verdaderamente arrepentido que estaba su padre, y su relación pudo fortalecerse nuevamente.
Todos cometemos errores. Y mas el padre de Christopher, estando en la difícil posición de estar a cargo de su hijo sin ninguna ayuda. Pero su padre quería muchísimo a su hijo, por eso siempre lo cuidaba e intentaba darle todo lo que le haría bien. “Padre dijo que sentía haberme pegado y que no había sido su intención hacerlo”. “Dijo que iba a llevarme de excursión para demostrarme que
de verdad lo sentía”. Su padre pudo enfrentar el rencor hacia la madre de Christopher, tanto como Christopher pudo enfrentar su orgullo, de a poco, a pesar de sus dificultades. “Tienes que saber que a partir de ahora voy a decirte la verdad. Acerca de todo.” Su padre, finalmente, se comprometió a no volver a hacerlo. Una relación tan fuerte como la relación padre-hijo no puede romperse.
BIBLIOGRAFIA.
http://www.centroleokanner.cl/Report/notas_asperger.htm
http://www.centroleokanner.cl/Report/reportaje_asperger_caras404.htm
Sasha Sorroche.
“El Curioso Incidente del perro a medianoche” es una curiosa novela acerca de un niño llamado Christopher Boone, quien padece de Síndrome de Asperger. A pesar de su gran capacidad e inteligencia para las matemáticas, Christopher es incapaz de relacionarse socialmente con las personas, porque una de las características principales de su enfermedad es ésta. Además no le gusta lo desconocido, ni el contacto físico con las personas. Los padres de un niño que tiene este trastorno neuromental deben tener mucha paciencia y conocer demasiado tanto a su hijo como a la enfermedad que padece, para evitar disgustos. “Cuando me di cuenta de que no compartía juegos, me preocupé. Se supone que a partir de los dos años, por crecimiento sicológico, los niños son capaces de entretenerse con otros. Cuando nació mi segunda hija, vi la diferencia abismante y me puse en alerta. Aparecieron otros signos como fobias, obsesiones, rutinas" dijo Isabel Ibacache, madre de niño de 15 años de edad que padece Asperger. El padre de Christopher conoce muy bien a su hijo, e intenta evitar todas las cosas que podrían llegar a hacerlo sentir mal, así como también aplica las cosas que a su hijo le gustan. “Levanto la mano derecha y abrió los dedos formando un abanico. Yo levante la mano izquierda y abrí los dedos formando un abanico e hicimos que nuestros dedos se tocaran. Hacemos eso porque a veces Padre quiere abrazarme, pero como a mí no me gustan los abrazos, hacemos eso en su lugar”. Pero el conocimiento y la paciencia de su padre hacia Christopher fue la causa principal por la que su madre abandono la casa, yéndose a vivir a Londres con el Senior Shears, ex esposo de la Señora Shears, que era una vecina de Christopher. Esto no quiere decir que la madre de Christopher haya sido una mala madre, sino que era diferente a su padre, y no tenia el mismo trato y la misma facilidad de relacionarse con su hijo, así como su padre la tenia. “Yo no soy como tu padre. Tu padre es una persona mucho más paciente y acepta las cosas como son y si alguna cosa le altera no lo demuestra. Pero yo no soy así, y no puedo hacer nada por cambiar eso”. Pero así es como, en un acto de ira, debido a que su esposa y madre de Christopher los había abandonado y lo había cambiado por el Senior Shears, el padre de Christopher mato a Wellington, el perro de la Señora Shears. Además porque la Señora Shears y el padre de Christopher eran amigos, pero por lo sucedido con su esposa, decidió cortar la amistad con la Señora Shears. Pero no se dio cuenta de que esa noche, Christopher andaba por el vecindario y vio al perro. Quiso saber insistentemente quien lo había matado, y así emprendió la búsqueda de quien había sido capaz de matar a un animal tan inocente como lo era un perro para el. Debido a la deficiencia de Christopher, esto le llevo bastante tiempo, y descubrió muchas cosas nuevas acerca de su padre. Pero uno de los problemas del padre de Christopher es que era demasiado cuidadoso y casi sobre protector de su hijo. “Cayó sobre mí una gran angustia, una sensación de desprotección, de mi niño, inmensa. Algo que nunca había sentido por mis hijos menores. Supe que estaba indefenso. Que era transparente, manipulable, frágil socialmente" cuenta otra madre de un niño con este síndrome. Al enterarse de una noticia como esta, los padres de niños con este problema quedan devastados, sin saber que hacer, y siendo vulnerables a sus propios hijos, ya que terminan sin saber como tratarlos, si normalmente, o de una manera especial. Y esto hizo que le mienta a Christopher sobre la muerte de su madre. Como su madre se había ido, el padre no sabia como iba a reaccionar Christopher si le contaba la verdad acerca de lo sucedido, o si iba a entenderlo, por eso decidió decirle que su madre había muerto. “Madre solo tenia 38 años y los ataques al corazón suele tenerlos la gente mayor, y Madre era muy activa y montaba en su bicicleta, y comía una comida sana, con mucha fibra”. Y como Christopher sabia que su padre no le mentiría nunca, porque el no lo soportaría, decidió creerle. Christopher no dudo de su padre por esa noticia, sino porque el sabia lo que era un ataque al corazón, y por eso lo relaciono con una aneurisma, dándole poca importancia al tema de su madre en si. Entonces, en las páginas siguientes, la búsqueda del asesino de Wellington queda en un plano secundario cuando Christopher descubre y entiende, lentamente, la clase de persona que era su Padre, narrando los hechos que lo llevan a descubrir la mentira, la misma que lleva a Christopher a enojarse con su padre e irse con su madre, no pudiendo entenderlo, por mas difícil que fuera, debido a su problema. “Si bien a estos niños les cuesta exteriorizar sentimientos, pueden llegar a confiar plenamente en alguien o, por el contrario, a ignorarlo para siempre si éste les hace daño.” Cuenta un reportaje aparecido en el Diario Mercurio de Santiago, Junio de 2002.
Christopher nunca hablaba con extraños, a no ser por necesidad. Por eso cuando emprendió la búsqueda del asesino de Wellington, hablo con algunas personas de su vecindario, haciendo de detective, pero nunca relacionándose con nadie nada mas que su padre. Pero la Señora Alexander le dijo a Christopher que el Senior Shears había engañado a su esposo con su madre, y por eso se fueron de la ciudad. Christopher no tuvo ninguna reacción ante esta noticia. “Pero no estoy triste, porque Madre esta muerta. Y porque el Senior Shears ya no anda por aquí. O sea que estaría poniéndome triste por algo que no es real y no existe. Y eso seria estupido”.
El Padre de Christopher escondió el libro que estaba escribiendo Christopher acerca de la búsqueda del asesino de Wellington, diciéndole que no se entrometa en la vida de los demás. A veces el propio padre de Christopher perdía los estribos al ver las incapacidades de su hijo. “Padre nunca me había agarrado de esa manera. Madre me había pegado algunas veces porque era una persona muy irascible. Pero Padre es una persona mas equilibrada, lo que significa que no se enfada tan rápido y no grita tan a menudo. Asíque me sorprendió mucho que me agarrara.” Pero Cristopher era muy insistente con el caso. “Quería recuperar mi libro porque me gustaba escribirlo. Me gustaba tener
un proyecto en marcha y me gustaba especialmente que fuera un proyecto difícil como un libro”. Un padre común como todos, teniendo un hijo que tiene Síndrome de Asperger, hubiese gozado de ver como su hijo se empeñaba en escribir un libro, ya que en la actualidad, muchos de estos niños hoy son profesionales o están en la universidad. El Padre de Christopher no quería que el escriba el libro por el simple hecho de que tenia miedo que su hijo descubriera las cosas que habían sucedido, y porque, claramente, no quería que se entere que el había matado a Wellington. El sabía cuales iban a ser las consecuencias si su hijo se enteraba de que el asesino del perro había sido su propio padre. Pero nunca llego a imaginarse que Christopher reaccionaria yéndose de su casa, a vivir con su madre, porque su padre era el que lo cuidaba a diario, y no su madre, que había decidido alejarse porque encontraba difícil relacionarse con su hijo.
Cuando Christopher leyó las cartas y pudo entender que su madre no estaba muerta, claramente su padre pasó a ser una persona mas, como todas. “Supe que el estaba en la habitación, pero su voz sonaba débil y lejana, como suenan a veces las voces de la gente cuando yo estoy gimiendo y no quiero que estén cerca de mi”. El miedo que sentía Christopher era razonable y lógico. Una persona como su padre nunca le mentía, y a pesar de las consecuencias y de la enfermedad de por medio, habían logrado una relación en base a la confianza y la protección, y este suceso se había convertido en una mera traición para el, implicando deslealtad. Pero una persona común hubiese entendido, o por lo menos intentado entender, y pedir explicaciones acerca de una mentira como esa, no huir de los hechos. Por esto mismo era que la relación entre Christopher y su padre era muy importante: no era fácil interactuar con un niño que presentaba una o más discapacidades, diferente a los demás niños de su edad. Y más todavía siendo un infante como lo era Christopher.
El padre de Christopher había quedado atontado, sin saber que decir ni como actuar, porque la situación lo había tomado de sorpresa, y porque sabía que a pesar de cualquier explicación que le diera a Christopher, los resultados iban a ser paupérrimos. “Lo hice por tu bien Christopher, de verdad que si. Nunca pretendí mentirte. Tan solo pensé que… Tan solo pensé que era mejor que no supieras… que… que… Yo no quería… Iba a enseñártelo cuando fueras mayor”. El padre de Christopher era una persona vulnerable, y se dejo llevar por el hecho de que su esposa lo había engañado, se marcho y los abandono. No solamente por eso el actúo de esa manera, sino porque al marcharse la madre de Christopher, el iba a quedar a cargo por completo de su hijo, que no era como todos, y necesitaba de una atención y protección constante. El pensó que seria mejor de esa manera. “Yo no sabia que decir… Estaba tan hecho polvo… Ella dejo una nota y… entonces llamo por teléfono y…”. Pero Christopher no le hablaba. Entonces su padre pensó que seria mejor confesarle que el había matado a Wellington, porque quedaba en juego su reputación en frente de su hijo. Y porque el no quería mas mentiras entre ellos. “Mira, a lo mejor no debería decirte esto, pero… quiero que sepas que puedes confiar en mi. Y a lo mejor no digo siempre la verdad. Dios sabe que lo intento, Christopher, la vida es difícil, ya lo sabes. Es durísimo decir la verdad todo el tiempo […] Yo mate a Wellington, Christopher.” Fue así como Cristopher entendió por completo todo lo que le había dicho su padre, y se sintió extraño y temeroso hacia el.
No quería estar cerca de su padre porque el asociaba la muerte de Wellington, el perro, con que el perjudicado podría haber sido también una persona, o con el mismo. Pero eso era imposible porque el padre de Christopher amaba a su hijo. Solamente se había dejado llevar, y había hecho que las cosas llegaran muy lejos. “Todos cometemos errores, Christopher. Tu, yo, tu mama, todo el mundo. Y a veces son errores verdaderamente grandes. Solo somos humanos.”
“Tenia que salir de casa. Padre había matado a Wellington”. Lo que menos hubiese imaginado el padre de Christopher, era que su hijo con síndrome de Asperger, teniendo la discapacidad propiamente dicha, hubiese sido capaz de irse de su casa completamente solo. Christopher no sabia adonde ir, cuando decidió irse con su madre. Esta fue una mala decisión de parte de Christopher, ya que su madre lo había dejado solo con su padre y se había ido a vivir muy lejos, solo por el hecho de que no sabía como relacionarse con su hijo, y sentía que su padre lo cuidaba mejor que ella, y que ambos tenían mas afinidad. Como ella sintió que estaba demás y que hacia las cosas mal, entonces decidió alejarse. Y alejarse no es la solución para los problemas, tampoco abandonar a un hijo. Pero Christopher no tenia la madurez y capacidad suficiente para analizar esto, y no tuvo en cuenta todas las cosas que su padre hizo por el. Pero, claramente, esta es una de las consecuencias del Síndrome de Asperger en los niños, y esta misma consecuencia se ve en los padres, obligándolos a veces a actuar de forma incorrecta, o guiándose inconcientemente por el miedo, tal como hizo el padre de Christopher; Aunque lo mismo hizo Christopher con su padre, guiándose por el miedo y no pudiendo confiar en el. Y así se fue de su casa.
Cuado el padre de Christopher se dio cuenta de que su hijo se había ido, hizo lo que sea por buscarlo. Su hijo estaba en la casa de su madre, en Londres. Los niños con síndrome de Asperger necesitan sentirse protegidos. Christopher sentía que su padre había violado su confianza, y ahora debía refugiarse, para sentirse protegido bajo los brazos de su madre. La madre de Christopher no era como su padre, no tenía la serenidad ni el esmero que tenia su padre en los distintos aspectos que abarcaban el cuidado de su hijo. Un día, Christopher había desaparecido. Estaba entre el contenedor y la furgoneta Ford Transit de la casa de su madre, porque ese lugar lo hacia sentirse tranquilo. “Si haces eso otra vez, te lo juro por Dios, Christopher… te quiero, pero… no se lo que haría.”
La madre de Christopher estaba feliz de haber vuelto a ver a su hijo. Pero su padre, desesperado por encontrarlo, lo que menos quería era que este con su
madre. No solo porque los había abandonado, tanto a el como a Christopher, sino también porque todavía seguía enojado con su ex esposa debido a su traición. El padre de Christopher no tiene la capacidad de afrontar la infidelidad de su mujer, lo que lo lleva a errar y casi perder la relación con su propio hijo.
Cuando Christopher por fin pudo dar el examen de bachiller en matemáticas, su padre estaba muy orgulloso de el, porque a pesar de su problema, y de todos los problemas que habían tenido, su hijo pudo hacer lo que mas le gustaba y deseaba hacer. “Estoy muy orgulloso de ti, Christopher. Muy orgulloso. Estoy seguro de que lo has hecho muy bien”. Para el padre era un logro muy grande hablar con su hijo en ese momento. Christopher solo hablaba con su padre porque su madre se lo pedía, pero el en realidad lo hacia porque sabia que, con la presencia de su madre, su padre no iba a poder hacerle daño. “Madre no volvía del trabajo hasta las 17.30 o sea que tenia que irme a casa de padre entre las 15.39 y las 17.30, porque no se me permitía estar solo y Madre dijo que no tenia elección, asíque colocaba la cama contra a puerta por si Padre trataba de entrar. Y a veces trataba de hablarme a través de la puerta, pero yo no le contestaba. Y otras veces lo oía sentarse en el suelo al otro lado de la puerta, en silencio, durante mucho rato”. Su padre estaba realmente arrepentido, y no quería perder a su hijo por el error que había cometido. “Christopher, mira… Las cosas no pueden seguir así. No se a ti, pero a mi esto… esto simplemente me duele demasiado. Lo de que tu estés en casa pero te niegues a hablar conmigo… Tienes que aprender a confiar en mí… Y no me importa cuanto tiempo haga falta […] Porque esto es más importante que cualquier otra cosa. Digamos que es… un proyecto. Un proyecto que tenemos que hacer juntos. Tú tienes que pasar más tiempo conmigo. Y yo… yo tengo que demostrarte que puedes confiar en mí. Y al principio será difícil porque es un proyecto difícil. Pero cada vez será mejor. Te lo prometo. No tienes que decir nada ahora mismo, no. Solo tienes que pensar en ello. Y… tengo un regalo. Para demostrarte que estoy hablando en serio. Y para decirte que lo siento”. Su padre le regaló un perro. “Ya veras lo que quiero decir”. Christopher de a poco entendió el significado del regalo, y lo verdaderamente arrepentido que estaba su padre, y su relación pudo fortalecerse nuevamente.
Todos cometemos errores. Y mas el padre de Christopher, estando en la difícil posición de estar a cargo de su hijo sin ninguna ayuda. Pero su padre quería muchísimo a su hijo, por eso siempre lo cuidaba e intentaba darle todo lo que le haría bien. “Padre dijo que sentía haberme pegado y que no había sido su intención hacerlo”. “Dijo que iba a llevarme de excursión para demostrarme que
de verdad lo sentía”. Su padre pudo enfrentar el rencor hacia la madre de Christopher, tanto como Christopher pudo enfrentar su orgullo, de a poco, a pesar de sus dificultades. “Tienes que saber que a partir de ahora voy a decirte la verdad. Acerca de todo.” Su padre, finalmente, se comprometió a no volver a hacerlo. Una relación tan fuerte como la relación padre-hijo no puede romperse.
BIBLIOGRAFIA.
http://www.centroleokanner.cl/Report/notas_asperger.htm
http://www.centroleokanner.cl/Report/reportaje_asperger_caras404.htm
Sasha Sorroche.