La caverna
Autor: José Saramago[…] La caverna habla de un modo de vivir que cada vez va siendo más ajeno. Todos los días se extinguen especies, todos los días hay profesiones que se tornan inútiles, idiomas que dejan de tener personas que los hablen, tradiciones que pierden sentido, sentimientos que se convierten en sus contrarios. El autor despliega su visión del mundo actual a la vez que nos alerta: no cambiaremos de vida si no cambiamos la vida. […]Uno de los temas en los que trata “la caverna”, es en el desarrollo de la tecnología, el desarrollo del mundo y de sus innovaciones, y cómo esto puede repercutir en una familia de campo que se dedica a la alfarería y es proveedora de un centro comercial en crecimiento continuo. A pesar de este dilema, es tratado el amor del padre, Cipriano Algor e hija, Marta Issaca Algor por apellido de la madre ya fallecida justamente en la alfarería. Conviven con Marcial Gacho, el esposo de Marta y yerno de Cipriano, el cual regresa a la casa cada diez días y permanece allí 3 días, ya que su empleo en el centro comercial como Guarda interno lo reclama.
Cipriano Algor: […] Es alfarero de profesión y tiene sesenta y cuatro años, aunque a simple vista aparenta menos edad. […] Dedicado a su trabajo desde toda su vida, sensible, no le gustan los juegos de palabras, respetuoso, cambios de ánimo a lo largo de la historia por distintos factores luego nombrados.
Marcial Gacho: Es un joven simpático, que no llega a los 30 años de edad, aunque nervioso, de la raza de los desasosegados de nacimiento, siempre inquieto con el paso del tiempo, incluso si lo tiene de sobra; ambicioso; no lleva una buena relación con sus padres, pero no podría vivir sin su suegro y su mujer.
Marta Issaca Algor: Hija de Cipriano Algor, joven, cariñosa, embarazada pero lo supo luego de dos semanas, sensible, amaba su casa de campo pero intentaba preferir el centro, cariñosa, estudios hechos, enamorada de Marcial Gacho, jugaba con las palabras.
El proceso en que la tecnología aumenta, puede ayudarnos en gran parte; sin embargo en esta historia podemos ver reflejo en la familia Algor las causas que puede realizar el acelerado crecimiento de ésta.
Marcial Gacho, era guarda interno de un Centro comercial en la ciudad, a 13 kilómetros de su casa de campo; Incluso Cipriano, era proveedor de vasijas de barro para un local del centro y siempre llevaba a su yerno al centro al mismo tiempo que descargaba sus pedidos.
Al enterarse que el completo pedido que el centro había requerido a Cipriano, ya no era totalmente necesitado, descargo solo la mitad de éste. El motivo del cual le informaron a Cipriano que los clientes ya no optaban por elegir el barro, fue el plástico, un nuevo material que imita perfectamente al barro, y con la ventaja de que pesan menos y son mucho más baratos. […] No quiero angustiarlo, pero creo que a partir de ahora sus lozas sólo interesarán a los coleccionistas, y esos son cada vez menos […] […] No traiga más hasta que no tenga noticias nuestras […] A lo largo de varios capítulos, se describen los sentimientos de tristeza y depresión que angustia a la familia, y más a Cipriano, que la alfarería llegó por herencia de su abuelo a sus manos.
Planeaban dejar la alfarería y mudarse al centro, cuando ascendieran a Marcial a Guarda Residente.
A Marta se le ocurrió la idea de poder salvar el negocio familiar, aún utilizando el barro como medio, pero realizando muñecos. Crearon enfermeras, esquimales, payasos, distintos personajes que ellos pensaron, serían atractivos para el público.
Se describe en largos capítulos el desarrollo de los muñecos, el esfuerzo de la familia.
Siguiendo con el proceso de estos muñecos, encontraron a un perro, al que lo llaman Encontrado, en la historia se describen los pensamientos y las reacciones que tiene este perro con su principal dueño, Cipriano, y su instinto canino, de acompañar a la familia durante esa dura etapa.
También se añade a este proceso, el amor que surge entre Isuara Madruga y Cipriano Algor, una vecina viuda, con la que se conocieron en el cementerio, y su amor permaneció en silencio hasta el día en que la familia se mudaría al centro y dejarán con ella a Encontrado.
Cuando Cipriano llevó el proyecto al centro, luego de esperar toda una tarde con ansias de saber que depararía de sus vidas, el centro acepto el proyecto, y pidió 200 muñecos de cada uno de los 6 diseños diferentes, el dilema volvió.
Se describe los problemas que van surgiendo a lo largo del proceso de los primeros 600 muñecos, pero esto aún no acaba; a demás de la angustia que afligía a Cipriano por su alfarería y el ocultamiento del amor que llevaba por Isaura, sus problemas no habían acabado; el centro realizó una encuesta para averiguar si el producto gustaría a los clientes, pero por mala suerte para ellos, los resultados fueron negativos. Esto nos muestra cómo quiere reflexionar Saramago en la influencia que creó el avance de los materiales, la tecnología… en la familia Argor, les cambió la vida. Cancelaron el pedido a la familia, y dieron por terminada la relación de ésta con el centro. […]Cipriano Algor se queja, se queja, pero no parece comprender que los barros amasados ya no se almacenan así, que a las industrias cerámicas básicas de hoy poco les falta para convertirse en laboratorios con empleados de bata blanca tomando notas y robots inmaculados acometiendo el trabajo. […]
Deciden definitivamente mudarse al centro, cambiar sus vidas para siempre, encerrarse ahí y consumir lo que ellos quieren que consuman; vivir otra realidad.
[…]Pronto nadie se acordará lo que existía aquí antes […] El centro estaba en continuo crecimiento, el consumismo que genera pertenecer a ese otro mundo, idealiza sus efectos y consecuencias asociando su práctica con la obtención de la satisfacción personal e incluso de la felicidad personal en los habitantes del centro.
Fueron a revisar el apartamento, se ubicaban en el piso treinta y cuatro, y todavía había catorce pisos más. Las ventanas no se podían abrir, por el aire acondicionado. Allí había: plantas, galerías, tiendas, escalinatas monumentales, escaleras mecánicas, puntos de encuentro, cafés, restaurantes, terrazas con mesas y sillas, cines y teatros, discotecas, pantallas enormes de televisión, infinitas decoraciones, juegos electrónicos, globos, surtidores y otros efectos de agua, plataformas, jardines colgantes, carteles, banderolas, paneles electrónicos, maniquíes, probadores, una fachada de iglesia, una playa, un bingo, un casino, un campo de tenis, un gimnasio, una montaña rusa, un zoológico, una pista de coches eléctricos, un ciclorama, una cascada, mostradores, expositores y escaparates con todo lo que existe para comer y para beber, para vestir y calzar, para el cabello y para la piel, para las uñas y para el vello, para colgar del cuello, para pender de las orejas, para ensartar en los dedos, para tintinear en las muñecas, para hacer y deshacer, para cocinar, para coser, para pintar, para aumentar y disminuir, para engordar y adelgazar, para extender y para encoger, para llenar y para vaciar. […]Cosas como probablemente todos conocen como una ascensión al paraíso […] Se creaba una falsa realidad de lo verdaderamente real, un mundo construido en el que viven miles de personas como si fuera lo único que existe.
Al fin llego el día de la mudanza, no podían llevar ningún mueble ya que todos los muebles en los apartamentos del centro eran los mismos y nuevos, asique solo empacaron la ropa, la subieron a la furgoneta, pero faltaba decidirse qué harían con Encontrado.
Cipriano se decidió por entregárselo a Isaura, la persona con la cual se besaría amorosamente al confesarle su profundo amor desde el día en que la vio en el cementerio hasta ahora, prometiendo que volvería.
En el final, el título de la novela se hace presente representada como una gruta cuando Cipriano la encuentra en el piso cero cinco del centro, en donde Marcial tenía que hacer guardia, y se rumoraban cosas aterrorizantes provenientes de ahí abajo. Allí, encontró los cuerpos de 6 personas, con los pies, cabezas y manos atadas en un banco de piedra, mirando hacia una pared. En el final Cipriano opina que esas 6 personas, eran ellos mismos, que veían esa realidad virtual en el centro, esa ilusión creada de la realidad y no la verdadera.
Cipriano decide alejarse de esa farsa, esa mentira, y vivir en el campo, como el tanto lo anhelaba, su hija y Marcial tomaron la decisión de dejarlo todo, y volver con él también; asique como podríamos imaginar, el amor entre Cipriano y Isaura se confirmó, y acompañados de Encontrado, ese fiel amigo, cargaron las cosas necesarias para empezar una nueva vida lejos del centro, y la alfarería ya desechada por esta nueva era, la tecnología.
En conclusión, yo pienso que Saramago trato de mostrarnos nuestra sociedad actual, representada como este gran centro comercial, no solo los aspectos positivos, sino los negativos, y la influencia de estos en lo que es la realidad.
Recursos de estilo:
En la obra se presentan METÁFORAS, ya que el narrador quiere mostrar el centro como nuestra sociedad de hoy en día.
Existen preguntas retóricas cuando Cipriano pierde el trabajo. […]¿qué será de nosotros mañana? […]
Hay elusión porque evita nombrar el acontecimiento ocurrido en la caverna. […]Fue la última gota […]
Valeria Rascón
2do Mercantil
Instituto María Ana Mogas
Instituto María Ana Mogas