Cien años de soledad:
Alumno: diego Fernándes
Curso: 2do gestión “A”
Introducción:
La novela Cien años de
Soledad, premiada como la mejor novela del siglo XX, fue escrita en el año 1967
por Gabriel García Márquez, y ya es una novela legendaria en la literatura
universal.
“Muchos años después,
frente al pelotón de fusilamiento, el coronel Aureliano Buendía había de
recordar aquella tarde remota en que su padre lo llevó a conocer el hielo.”
Con éstas palabras
comienza la novela cuyas historias se desarrollan en torno a la fundación del
pequeño pueblo de “Macondo” donde sus pocos pioneros habitantes pasan sus días
enfrentando vivencias cotidianas de acuerdo a las situaciones que allí se
presentan, expresando sus sentimientos y desarrollando sus personalidades
características de cada uno frente a las problemáticas diarias.
A partir de todo lo
cotidiano, se suceden historias y sucesos que inciden en la vida de la familia
“Buendía”.
Las historias que se
suscitan a lo largo de cien años y de siete generaciones, narran hechos
variados e individuales que se originan con el nacimiento del pueblo y la
convivencia de esas pocas familias fundadoras.
Tema principal de la obra y lugar:
La novela narra la historia de José
Arcadio Buendía que desobedeciendo a sus padres se casa con su prima Ursula
Iguaran y a partir de esto cae sobre la familia una maldición que tendrá como
resultado cien años de soledad y afectará a las siguientes generaciones. Se
decía que un matrimonio entre familiares podía tener un hijo con cola de cerdo.
El tema principal de la obra apunta a la fundación de un pueblo llamado
Macando, fundado por José Arcadio Buendía. Esta familia junto con otras
emprendieron una expedición en la búsqueda de un lugar para establecerse. José
Arcadio Buendía finalmente descubre el pueblo Macondo, el cual rodeado de agua,
era un lugar paradisíaco.
Este grupo de familias se establecen allí y comienzan a desarrollarse
diversas aventuras y desventuras entre sus habitantes: fantasías, amoríos,
tragedias, descubrimientos, adulterios, incestos, etc, durante el transcurso de
siete generaciones. Todo esto reunido forma el tema principal de la obra
(acontecimientos cotidianos estimulados por inquietudes y aspiraciones de sus
habitantes que actúan y reaccionan de diversas maneras incidiendo directa o
indirectamente en la vida de la familia Buendía.
Macondo, un pueblo que en su origen había sido una especie de paraíso
rodeado de agua, atraviesa diferentes etapas de progreso y decadencia, hasta
que debido a guerras y ambiciones concluye con su eminente desaparición.
Forma de narrador: tercera persona
La historia esta narrada por un narrador omnisciente, o sea que no
participa del desarrollo de los hechos. Los relata desde afuera, posición que
le permite comunicar lo que los personajes piensan, sienten y hacen, contando y
refiriéndose a los movimientos y actitudes que asumen los personajes del
pueblo.
Personajes principales
1)
José
Arcadio Buendía: fundador principal del pueblo de Macondo, emprendedor y
soñador cuyo objetivo es que el pueblo se desarrolle social y económicamente.
2)
Ursula
Iguaran: Esposa de José Arcadio Buendía. Dedicada a su familia y muy
trabajadora. A menudo disiente con su esposo por sus diferentes maneras de
vivir.
3)
Amanda
Buendía: Única hija del matrimonio, interesada por un solo hombre, Pietro
Crespi. Eso la llevó a morir soltera y virgen.
4)
Rebeca
Montiel: hija adoptiva del matrimonio Buendía. Profundamente atraída por la
personalidad de Pietro Crespi, pero se convierte en la esposa de José Arcadio,
su hermanastro.
5)
José
Arcadio: primer hijo del matrimonio Buendía. Su madre lo lleva a ver a una
adivina porque creía ver en él al niño con cola de cerdo. Durante el transcurso
de las visitas, José y la adivina se convierten en amantes.
6)
Aureliano:
segundo hijo del matrimonio Buendía y el primero en nacer en Macondo.
Apasionado por las armas y las ciencias. Solitario e introvertido.
7)
Melquíades:
personaje fundamental en la novela ya que él escribe la historia de la familia
Buendía antes que se viva. Interesado en el alquimismo. Lleva a Macondo ciertos
inventos como la brújula, el imán y le ayudó a José Arcadio Buendía en la
construcción de un laboratorio.
Citas
Cap.1 Pág. 19: “Macondo fue una aldea ordenada y laboriosa que
cualquiera de las conocidas hasta entonces por sus 300 habitantes. Era, en
verdad, una aldea feliz donde nadie era mayor de 30 años y donde nadie había
muerto”.
Pág. 20: “José Arcadio Buendía ignoraba por completo la
geografía de la región. Sabía que el oriente estaba la sierra impenetrable y al
otro lado de la sierra la antigua ciudad de Riohacha, donde los caimanes se
solían cazar a cañonazos, según lo había dicho su abuelo, Sir Francis Drake,
quien cazaba caimanes a cañonazos, luego los hacía remendar y rellenar de paja
para llevárselos a la reina Isabel.
Cap. 2: Pág. 44: “Al principio, el pequeño Aureliano sólo
comprendía el riesgo, la inmensa posibilidad de peligro que implicaban las
aventuras de su hermano, pero no lograba concebir la fascinación del objetivo.
Poco a poco se fue contaminando de ansiedad. Se hacía contar las minuciosas
peripecias, se identificaba con el sufrimiento y gozo de su hermano, se sentía
asustado y feliz.”
Cap. 3 Pág. 65: “Los habitantes de Macondo estaban dispuestos a
luchar contra el olvido: Esta es la vaca, hay que ordeñarla todas las mañanas
para que produzca leche y a la leche hay que hervirla para mezclarla con el
café y hacer café con leche”. Así continuaron viviendo en una realidad
escurridiza…
Cap. 3: Pág. 73: Una
noche, una predicción: “Macondo seria una ciudad luminosa, con grandes casas de
vidrios, donde no quedaba ninguna estirpe de los Buendía.”
José Arcadio Buendía tronó: “No serán casas de vidrio, sino de hielo,
como yo lo soñé, y siempre habrá un Buendía por los siglos de los siglos.”
Cap. 4: Pág. 96: Melquíades: “Cuando me muera, quemen mercurio
durante tres días en mi cuarto.” “He alcanzado la inmortalidad.”
Cap. 5: Pág. 121: José
Arcadio le comunica a Pietro Crespi que se casa con Rebeca. Pietro se puso
pálido: “Es su hermana. Es contra natura y además, la ley lo prohíbe.”
José Arcadio se impacientó no tanto con la argumentación como con la
palidez de Pietro: “Me cago dos veces en natura”
Cap. 6: Pág. 135: Dijo Apolinar Moscote en cierta ocasión:
“Ahora sufran la diferencia, esto es el paraíso liberal.”
Cap. 7: Pág. 163: “No lo fusilarán aquí”, le decía José Arcadio.
“Lo fusilarán a media noche en el cuartel para que nadie sepa quien formó el
pelotón, y lo enterrarán allá mismo.”
Cap. 8: Pág. 191: “Lo que el general Moncada sabía, era que el
coronel Aureliano Buendía estaba ya en camino para ponerse al frente de la
rebelión mas prolongada, radical y sangrienta de cuantas se habían intentado
hasta entonces.”
Cap. 9: Pág. 220: el coronel Gerineldo Márquez fue a buscar a
José Arcadio Buendía en compañía de un grupo de oficiales rebeldes y lo
encontró mas pensativo, taciturno y solitario que nunca. Ursula lo tapo con una
manta nueva: -“que va a pensar el gobierno! Se imaginaran que te has rendido
por que ya no tenias ni con que comprar una manta”.”
Cap. 10: Pág. 231: Melquíades le hablaba del mundo a Aureliano
Segundo tratando de influir su vieja sabiduría, pero se negó a traducir los
escritos: -“nadie debe conocer su sentido mientras no hayan cumplido cien
años”.
Cap. 11: Pág.254: A quienes se compadecieron con su suerte,
Petra Cotes los tranquilizo:-“no se preocupen, a mi las reinas me hacen los
mandados”.
Cap. 12: Pág.283: -“Miren la vaina que nos hemos buscado”, solía
decir entonces el coronel Aureliano Buendía. “No mas por invitar un gringo a
comer guineo”.
Cap. 13: Pág.312: -“Esta era la ultima vaina que nos
faltaba-refunfuño Aureliano Buendía-: ¡Un papa!”.
Cap. 14: Pág.345: Quienes
no quisieron escribir le dieron a Amarantar recados verbales que ella anoto en
una libreta con el nombre y la fecha de muerte del destinatario:-“no se
preocupe, tranquilizaba a los remitentes. “Lo primero que Hare al llegar Será
preguntar por el, y le daré su recado.”
Cap. 15:
Pág.377: -“Aquí no a habido
muertos”, dijo la mujer. “Desde los tiempos de tu tío, el coronel, no ha pasado
nada en Macondo”.
Cap. 16: Pág.391: -“Adiós,
Gerineldo, hijo mío”-gritó Ursula -. “salúdame a mi gente y dile que nos vemos
cuando escape”.
Aureliano Segundo la
ayudó a volver a la cama y le preguntó el significado de su despedida.-“Es
verdad”-dijo ella. “Nada más estoy esperando que pase la lluvia para morirme.”
Cap. 17: Pág.412: José
Arcadio Segundo no quería ver el tren de 200 vagones cargados de muertos que
cada atardecer partía de Macondo hacia el mar. –“Son todos los que estaban en
la estación, -gritaban – “tres mil cuatrocientos ocho.”
Cap. 18: Pág.439: La
última vez que Aureliano sintió a Melquíades era apenas una presencia invisible
que murmuraba:- “He muerto de fiebre en los médanos de Singapur.”
Cap. 19: Pág.484: Amaranta Ursula fue
cerrando los dedos, contrayéndolos como un molusco, hasta que su mano herida,
liberada de todo dolor y todo vestigio de misericordia, se convirtió en un nudo
de esmeraldas y topacios, y huesos pétreos e insensibles. –“Bruto!”-dijo como
si estuviera escupiendo – “Me voy a Bélgica en el primer barco que salga.”
Cap. 20: Pág.491: El abuelo sabio
comentó muerto de risa que aquel era el destino natural de la literatura. Se
soltó en improperios cartagineses contra los inspectores del ferrocarril que
trataban de mandarlos como carga, hasta que consiguió quedarse con ellos en el
vagón de pasajeros. –“El mundo habrá acabado de joderse –dijo entonces- el día
en que los hombres viajen en primera clase y la literatura en el vagón de
carga.”
Pág.510:
Estaba previsto que la ciudad de los espejos(o
los espejismos) sería arrasada por el viento y desterrada de la memoria de los
hombres en el instante en que Aureliano Babilonia acabara de descifrar los
pergaminos y que todo lo escrito en ellos era irrepetible desde siempre y para
siempre, porque las estirpes condenadas a cien años de soledad no tenían una
segunda oportunidad sobre la tierra.
Alumno: diego Fernándes
Curso: 2do gestión “A”
Introducción:
La novela Cien años de
Soledad, premiada como la mejor novela del siglo XX, fue escrita en el año 1967
por Gabriel García Márquez, y ya es una novela legendaria en la literatura
universal.
“Muchos años después,
frente al pelotón de fusilamiento, el coronel Aureliano Buendía había de
recordar aquella tarde remota en que su padre lo llevó a conocer el hielo.”
Con éstas palabras
comienza la novela cuyas historias se desarrollan en torno a la fundación del
pequeño pueblo de “Macondo” donde sus pocos pioneros habitantes pasan sus días
enfrentando vivencias cotidianas de acuerdo a las situaciones que allí se
presentan, expresando sus sentimientos y desarrollando sus personalidades
características de cada uno frente a las problemáticas diarias.
A partir de todo lo
cotidiano, se suceden historias y sucesos que inciden en la vida de la familia
“Buendía”.
Las historias que se
suscitan a lo largo de cien años y de siete generaciones, narran hechos
variados e individuales que se originan con el nacimiento del pueblo y la
convivencia de esas pocas familias fundadoras.
Tema principal de la obra y lugar:
La novela narra la historia de José
Arcadio Buendía que desobedeciendo a sus padres se casa con su prima Ursula
Iguaran y a partir de esto cae sobre la familia una maldición que tendrá como
resultado cien años de soledad y afectará a las siguientes generaciones. Se
decía que un matrimonio entre familiares podía tener un hijo con cola de cerdo.
El tema principal de la obra apunta a la fundación de un pueblo llamado
Macando, fundado por José Arcadio Buendía. Esta familia junto con otras
emprendieron una expedición en la búsqueda de un lugar para establecerse. José
Arcadio Buendía finalmente descubre el pueblo Macondo, el cual rodeado de agua,
era un lugar paradisíaco.
Este grupo de familias se establecen allí y comienzan a desarrollarse
diversas aventuras y desventuras entre sus habitantes: fantasías, amoríos,
tragedias, descubrimientos, adulterios, incestos, etc, durante el transcurso de
siete generaciones. Todo esto reunido forma el tema principal de la obra
(acontecimientos cotidianos estimulados por inquietudes y aspiraciones de sus
habitantes que actúan y reaccionan de diversas maneras incidiendo directa o
indirectamente en la vida de la familia Buendía.
Macondo, un pueblo que en su origen había sido una especie de paraíso
rodeado de agua, atraviesa diferentes etapas de progreso y decadencia, hasta
que debido a guerras y ambiciones concluye con su eminente desaparición.
Forma de narrador: tercera persona
La historia esta narrada por un narrador omnisciente, o sea que no
participa del desarrollo de los hechos. Los relata desde afuera, posición que
le permite comunicar lo que los personajes piensan, sienten y hacen, contando y
refiriéndose a los movimientos y actitudes que asumen los personajes del
pueblo.
Personajes principales
1)
José
Arcadio Buendía: fundador principal del pueblo de Macondo, emprendedor y
soñador cuyo objetivo es que el pueblo se desarrolle social y económicamente.
2)
Ursula
Iguaran: Esposa de José Arcadio Buendía. Dedicada a su familia y muy
trabajadora. A menudo disiente con su esposo por sus diferentes maneras de
vivir.
3)
Amanda
Buendía: Única hija del matrimonio, interesada por un solo hombre, Pietro
Crespi. Eso la llevó a morir soltera y virgen.
4)
Rebeca
Montiel: hija adoptiva del matrimonio Buendía. Profundamente atraída por la
personalidad de Pietro Crespi, pero se convierte en la esposa de José Arcadio,
su hermanastro.
5)
José
Arcadio: primer hijo del matrimonio Buendía. Su madre lo lleva a ver a una
adivina porque creía ver en él al niño con cola de cerdo. Durante el transcurso
de las visitas, José y la adivina se convierten en amantes.
6)
Aureliano:
segundo hijo del matrimonio Buendía y el primero en nacer en Macondo.
Apasionado por las armas y las ciencias. Solitario e introvertido.
7)
Melquíades:
personaje fundamental en la novela ya que él escribe la historia de la familia
Buendía antes que se viva. Interesado en el alquimismo. Lleva a Macondo ciertos
inventos como la brújula, el imán y le ayudó a José Arcadio Buendía en la
construcción de un laboratorio.
Citas
Cap.1 Pág. 19: “Macondo fue una aldea ordenada y laboriosa que
cualquiera de las conocidas hasta entonces por sus 300 habitantes. Era, en
verdad, una aldea feliz donde nadie era mayor de 30 años y donde nadie había
muerto”.
Pág. 20: “José Arcadio Buendía ignoraba por completo la
geografía de la región. Sabía que el oriente estaba la sierra impenetrable y al
otro lado de la sierra la antigua ciudad de Riohacha, donde los caimanes se
solían cazar a cañonazos, según lo había dicho su abuelo, Sir Francis Drake,
quien cazaba caimanes a cañonazos, luego los hacía remendar y rellenar de paja
para llevárselos a la reina Isabel.
Cap. 2: Pág. 44: “Al principio, el pequeño Aureliano sólo
comprendía el riesgo, la inmensa posibilidad de peligro que implicaban las
aventuras de su hermano, pero no lograba concebir la fascinación del objetivo.
Poco a poco se fue contaminando de ansiedad. Se hacía contar las minuciosas
peripecias, se identificaba con el sufrimiento y gozo de su hermano, se sentía
asustado y feliz.”
Cap. 3 Pág. 65: “Los habitantes de Macondo estaban dispuestos a
luchar contra el olvido: Esta es la vaca, hay que ordeñarla todas las mañanas
para que produzca leche y a la leche hay que hervirla para mezclarla con el
café y hacer café con leche”. Así continuaron viviendo en una realidad
escurridiza…
Cap. 3: Pág. 73: Una
noche, una predicción: “Macondo seria una ciudad luminosa, con grandes casas de
vidrios, donde no quedaba ninguna estirpe de los Buendía.”
José Arcadio Buendía tronó: “No serán casas de vidrio, sino de hielo,
como yo lo soñé, y siempre habrá un Buendía por los siglos de los siglos.”
Cap. 4: Pág. 96: Melquíades: “Cuando me muera, quemen mercurio
durante tres días en mi cuarto.” “He alcanzado la inmortalidad.”
Cap. 5: Pág. 121: José
Arcadio le comunica a Pietro Crespi que se casa con Rebeca. Pietro se puso
pálido: “Es su hermana. Es contra natura y además, la ley lo prohíbe.”
José Arcadio se impacientó no tanto con la argumentación como con la
palidez de Pietro: “Me cago dos veces en natura”
Cap. 6: Pág. 135: Dijo Apolinar Moscote en cierta ocasión:
“Ahora sufran la diferencia, esto es el paraíso liberal.”
Cap. 7: Pág. 163: “No lo fusilarán aquí”, le decía José Arcadio.
“Lo fusilarán a media noche en el cuartel para que nadie sepa quien formó el
pelotón, y lo enterrarán allá mismo.”
Cap. 8: Pág. 191: “Lo que el general Moncada sabía, era que el
coronel Aureliano Buendía estaba ya en camino para ponerse al frente de la
rebelión mas prolongada, radical y sangrienta de cuantas se habían intentado
hasta entonces.”
Cap. 9: Pág. 220: el coronel Gerineldo Márquez fue a buscar a
José Arcadio Buendía en compañía de un grupo de oficiales rebeldes y lo
encontró mas pensativo, taciturno y solitario que nunca. Ursula lo tapo con una
manta nueva: -“que va a pensar el gobierno! Se imaginaran que te has rendido
por que ya no tenias ni con que comprar una manta”.”
Cap. 10: Pág. 231: Melquíades le hablaba del mundo a Aureliano
Segundo tratando de influir su vieja sabiduría, pero se negó a traducir los
escritos: -“nadie debe conocer su sentido mientras no hayan cumplido cien
años”.
Cap. 11: Pág.254: A quienes se compadecieron con su suerte,
Petra Cotes los tranquilizo:-“no se preocupen, a mi las reinas me hacen los
mandados”.
Cap. 12: Pág.283: -“Miren la vaina que nos hemos buscado”, solía
decir entonces el coronel Aureliano Buendía. “No mas por invitar un gringo a
comer guineo”.
Cap. 13: Pág.312: -“Esta era la ultima vaina que nos
faltaba-refunfuño Aureliano Buendía-: ¡Un papa!”.
Cap. 14: Pág.345: Quienes
no quisieron escribir le dieron a Amarantar recados verbales que ella anoto en
una libreta con el nombre y la fecha de muerte del destinatario:-“no se
preocupe, tranquilizaba a los remitentes. “Lo primero que Hare al llegar Será
preguntar por el, y le daré su recado.”
Cap. 15:
Pág.377: -“Aquí no a habido
muertos”, dijo la mujer. “Desde los tiempos de tu tío, el coronel, no ha pasado
nada en Macondo”.
Cap. 16: Pág.391: -“Adiós,
Gerineldo, hijo mío”-gritó Ursula -. “salúdame a mi gente y dile que nos vemos
cuando escape”.
Aureliano Segundo la
ayudó a volver a la cama y le preguntó el significado de su despedida.-“Es
verdad”-dijo ella. “Nada más estoy esperando que pase la lluvia para morirme.”
Cap. 17: Pág.412: José
Arcadio Segundo no quería ver el tren de 200 vagones cargados de muertos que
cada atardecer partía de Macondo hacia el mar. –“Son todos los que estaban en
la estación, -gritaban – “tres mil cuatrocientos ocho.”
Cap. 18: Pág.439: La
última vez que Aureliano sintió a Melquíades era apenas una presencia invisible
que murmuraba:- “He muerto de fiebre en los médanos de Singapur.”
Cap. 19: Pág.484: Amaranta Ursula fue
cerrando los dedos, contrayéndolos como un molusco, hasta que su mano herida,
liberada de todo dolor y todo vestigio de misericordia, se convirtió en un nudo
de esmeraldas y topacios, y huesos pétreos e insensibles. –“Bruto!”-dijo como
si estuviera escupiendo – “Me voy a Bélgica en el primer barco que salga.”
Cap. 20: Pág.491: El abuelo sabio
comentó muerto de risa que aquel era el destino natural de la literatura. Se
soltó en improperios cartagineses contra los inspectores del ferrocarril que
trataban de mandarlos como carga, hasta que consiguió quedarse con ellos en el
vagón de pasajeros. –“El mundo habrá acabado de joderse –dijo entonces- el día
en que los hombres viajen en primera clase y la literatura en el vagón de
carga.”
Pág.510:
Estaba previsto que la ciudad de los espejos(o
los espejismos) sería arrasada por el viento y desterrada de la memoria de los
hombres en el instante en que Aureliano Babilonia acabara de descifrar los
pergaminos y que todo lo escrito en ellos era irrepetible desde siempre y para
siempre, porque las estirpes condenadas a cien años de soledad no tenían una
segunda oportunidad sobre la tierra.