Foro de Literatura

Would you like to react to this message? Create an account in a few clicks or log in to continue.

    Ensayo del Curioso incidente del perro a madianoche.

    avatar
    Roman Petreniuk


    Posts : 1
    Join date : 29/04/2010

    Ensayo del Curioso incidente del perro a madianoche. Empty Ensayo del Curioso incidente del perro a madianoche.

    Post  Roman Petreniuk Thu Apr 29, 2010 7:51 pm

    Ensayo de la novela "El curioso incidente del perro a medianoche" del escritor británico Mark Haddon por Román Ignacio Petreniuk.
    Tema: Las emociones de Christopher y su comprensión de las mismas.
    El curioso incidente del perro a medianoche trata de un chico llamado Christopher quien padece del síndrome de Asperger. Este síndrome, entre otras características, tiene la peculiaridad de no permitirle distinguir las distintas emociones ni las expresiones faciales de las demás personas, además de no permitirle expresar correctamente las suyas.
    Por otro lado, Christopher es una persona muy sensible a las reacciones de los demás, por lo que en varias ocasiones se encuentra violentándose contra otras personas.
    Estos hechos son los que, en conjunto con sus dificultades, culminan en el abandono de su madre, situación que es tratada de ocultar por su padre. Esta decisión de ocultar la verdad por parte de su padre, es un misterio que sale a luz en la investigación de Christopher de otro misterio, el de un perro que es asesinado a medianoche con una horca.
    Todos estos hechos y misterios que vive Christopher son escritos por el mismo en un libro que luego se convertiría en la mismísima novela. En ese libro se puede apreciar su “falta” de sentimientos; y su incapacidad para comprender y entender las reacciones y expresiones de las demás personas.
    Antes de comenzar a desarrollar el tema de las emociones de Christopher, una pequeña explicación del síndrome de asperger:
    “La mayoría de las personas son capaces de asociar información acerca de los estados cognitivo y emocionales de otras personas basándose en pistas otorgadas por el entorno y el lenguaje corporal de la otra persona. Las personas con Síndrome de Asperger (SA) no poseen esta habilidad, no son empáticas; se puede decir que tienen una especie de “ceguera emocional”. Para las personas más severamente afectadas puede resultar imposible incluso reconocer el significado de una sonrisa o, en el peor de los casos, simplemente no ver en cualquier otro gesto facial, corporal o cualquier otro matiz de comunicación indirecta. Del mismo modo, el control voluntario de la mímica facial puede estar comprometido.”
    Fuente: http://www.eliceo.com/actualidad/sindrome-o-trastorno-de-asperger.html
    Ahora sí, es hora de pasar al tema del ensayo en cuestión, las emociones de Christopher.
    Desde el principio del libro, Christopher manifiesta que no entiende lo que quieren decir las personas con sus expresiones. Por eso Siobhan, quien se encargaba de cuidarlo en el colegio y quien lo ayudo con su libro, le enseño reconocer expresiones básicas:
    “Hace ocho años, cuando conocí a Siobhan, me enseñó este dibujo

    y supe que significaba «triste», que es como me sentí cuando encontré al
    perro muerto.
    Luego me enseñó este dibujo

    y supe que significaba «contento», como estoy cuando leo sobre las misiones
    espaciales Apolo, o cuando aún estoy despierto a las tres o las cuatro de la
    madrugada y recorro la calle de arriba abajo y me imagino que soy la única
    persona en el mundo entero.”

    También intento enseñarle otras expresiones más complejas, pero no tuvo éxito ya que Christopher no lograba entenderlas. Además quiso anotarlas en un papel para revisarlo cuando esté hablando con alguna persona pero Siobhan le comento que confundiría a la gente:
    “Después hizo otros dibujos

    pero no supe decir qué significaban.
    Pedí a Siobhan que me dibujara más caras de ésas y escribiera junto a ellas
    qué significaban exactamente. Me guardé la hoja en el bolsillo y la sacaba cuando
    no entendía lo que alguien me estaba diciendo. Pero era muy difícil decidir cuál de
    los diagramas se parecía más a la cara que veía, porque las caras de la gente se
    mueven muy deprisa.
    Cuando le conté a Siobhan lo que hacía, sacó un lápiz y otra hoja y dijo que
    probablemente eso hacía que la gente se sintiera muy

    y entonces se rió. Así que rompí mi hoja y la tiré. Y Siobhan me pidió
    disculpas. Ahora cuando no sé qué me está diciendo alguien le pregunto qué
    quiere decir o me marcho”

    Pero para comprender correctamente porque Christopher no lograba entender a la gente y recurría a ideas como estas, hay que leer las razones que él mismo daba:
    “La gente me provoca confusión.
    Eso me pasa por dos razones principales.
    La primera razón principal es que la gente habla mucho sin utilizar ninguna
    palabra. Siobhan dice que si uno arquea una ceja puede querer decir montones de
    cosas distintas. Puede significar «quiero tener relaciones sexuales contigo» y
    también puede querer decir «creo que lo que acabas de decir es una estupidez».
    Siobhan también dice que si cierras la boca y expeles aire con fuerza por la
    nariz puede significar que estás relajado, o que estás aburrido o que estás
    enfadado, y todo depende de cuánto aire te salga por la nariz y con qué rapidez y
    de qué forma tenga tu boca cuando lo hagas y de cómo estés sentado y de lo que
    hayas dicho justo antes y de cientos de otras cosas que son demasiado
    complicadas para entenderlas en sólo unos segundos.
    La segunda razón principal es que la gente con frecuencia utiliza metáforas.”
    “Yo creo que debería llamarse mentira porque no hay días de mil demonios y
    la gente no tiene cadáveres en los armarios. Cuando trato de formarme una
    imagen en mi cabeza de una de estas frases me siento perdido porque una niña en
    los ojos de alguien no tiene nada que ver con que algo le guste mucho y te olvidas
    de lo que la persona decía.”

    Sin embargo, en ocasiones, Christopher se las arreglaba para comprender lo que querían decirle:
    “Entonces Padre golpeó el volante con un puño y el coche zigzagueó un
    poquito sobre la raya discontinua del centro de la carretera, y Padre gritó:
    —He dicho que lo dejes ya, por el amor de Dios.
    Entendí que estaba enfadado porque gritaba. Yo no quería hacerle enfadar,
    así que no dije nada más hasta que llegamos a casa.”
    En esta ocasión su padre estaba enojado debido a la insistencia de Christopher por descubrir quien mato al perro de la señora Shears pero también se puede apreciar cómo, bastante más tarde, el padre se encontraba triste por la situación que estaban viviendo:
    “A las 2.07 de la madrugada decidí que quería un vaso de zumo de naranja
    antes de lavarme los dientes e irme a la cama, así que bajé a la cocina. Padre
    estaba sentado en el sofá viendo un campeonato de billar en la televisión y
    bebiendo whisky. De los ojos le caían lágrimas.
    Le pregunté.
    —¿Estás triste por lo de Wellington?
    Me miró durante largo rato e inspiró aire por la nariz. Luego dijo:
    —Sí, Christopher, podría decirse que sí. Ya lo creo.
    Decidí dejarlo solo porque cuando estoy triste quiero que me dejen solo. Así
    que no dije nada más. Fui a la cocina, me hice el zumo de naranja y me lo llevé de
    vuelta a mi habitación”

    Esta última cita demuestra como Christopher se daba cuenta de las emociones del padre mediante las lágrimas que le caían de los ojos.
    Más adelante, cuando Christopher comenta como fue que perdió a su madre, resume en una frase si situación mental:
    “uando volvió, bajé por la escalera. Él
    estaba sentado en la cocina mirando por la ventana de atrás hacia el jardín y el
    pozo y la verja de chapa de cinc y la parte superior de la torre de la iglesia de la
    calle Manstead, que parece un castillo porque es normanda. Padre dijo:
    —Me temo que no vas a ver a tu madre durante una temporada.
    Lo dijo sin mirarme. Siguió mirando por la ventana.
    Normalmente, la gente te mira cuando te habla. Sé que tratan de captar lo
    que estoy pensando, pero yo soy incapaz de captar lo que piensan ellos. Es como
    estar en una habitación con un espejo de un solo sentido en una película de espías.
    Aquello era agradable, lo de que Padre me hablara sin mirarme.”

    La frase en efecto es “[…] yo soy incapaz de captar lo que piensan ellos […]” que es justamente lo que no le permite entender las emociones o expresiones de los demás.
    Pese a que su padre le había dicho que no continuara con su investigación sobre el perro de la señora Shears, decidió seguir buscando al asesino. Pero para poder encontrar al asesino necesitaba interrogar a los vecinos de la zona, tarea que le costaría mucho por su problema para relacionarse y entender a los demás:
    “Me lleva mucho tiempo acostumbrarme a la gente que no conozco. Por
    ejemplo, cuando en el colegio hay un miembro nuevo del equipo de educadores no
    le hablo durante semanas y semanas. Lo observo hasta saber que no representa un
    peligro. Entonces le hago preguntas sobre sí mismo, si tiene mascotas, cuál es su
    color favorito, qué sabe de las misiones espaciales Apolo, y le hago dibujarme un
    plano de su casa y le pregunto qué coche tiene, para así conocerlo mejor. Entonces
    ya no me importa si estoy en la misma habitación que esa persona, y ya no tengo
    que vigilarla constantemente.”

    Aunque tenía una gran dificultad para hablar con desconocidos, el quería hacer de detective y descubrir al asesino.
    Aquí otra cita que explica un poco su dificultad desde su punto de vista:
    “A eso tampoco contesté, porque la señora Alexander estaba haciendo lo que
    se llama charlar, que es cuando la gente se dice cosas entre sí que no son
    preguntas y respuestas y que no tienen relación.”

    Continuando con su investigación, Christopher entablaba más conversaciones con la señora Alexander, quien le da un dato importante, que el señor Shears aparentemente se acostaba con la madre de Christopher.
    La importancia de ese dato se debe a que sería unos de los pilares para hacer que descubra el misterio más importante, el de su madre. Aunque constantemente debía evitar que su padre lo descubra:
    “Entonces Padre dijo:
    —¿Dónde andabas, jovencito?
    —He ido a la tienda a comprarme unos regalices y una Milky Bar —dije.
    Y él me dijo:
    —Has tardado mucho.
    Y yo dije:
    —He hablado con el perro de la señora Alexander fuera de la tienda. Y lo he
    acariciado y me ha olisqueado los pantalones. —Lo cual era otra mentira piadosa.”

    Un poco más adelante en esta misma parte de la novela, Christopher menciona como el padre le explica la forma de ser de algunas personas:
    “Y Rhodri dijo:
    —No tengo ni la más remota idea. —Y se rió.
    No me gusta que Rhodri se ría de mí. Rhodri siempre se está riendo de mí.
    Padre dice que eso es ser simpático.”

    También, en algunas partes de la novela, como cuando la señora Alexander le pregunta a Christopher su estado emocional por haberse enterado de las “aventuras” de su madre con el señor Shears, demuestra una cierta falta de expresión de sentimientos en él mismo:
    “Si esto te hiciera sentir triste, quiero que sepas que puedes venir a
    hablarme de ello. Porque creo que hablar conmigo te ayudará a sentirte menos
    triste. Y si no estás triste pero sencillamente quieres hablarme de ello, también me
    parecerá bien. ¿Lo comprendes?
    Y yo dije:
    —Sí, lo entiendo.
    Y ella dijo:
    —Bien.
    —Pero no estoy triste —dije yo—. Porque Madre está muerta. Y porque el
    señor Shears ya no anda por aquí. O sea que estaría poniéndome triste por algo
    que no es real y no existe. Y eso sería estúpido.”

    Mas avanzando en la novela, cuando Christopher comienza a aclarar el misterio de su madre leyendo unas cartas que encontró escondidas en la habitación de su padre, se ve como ,a faltar de poder expresar correctamente sus emociones, tiene una especie de colapso:
    “Me esforcé mucho en pensar si había otra explicación, pero no se me ocurrió
    ninguna. Y entonces ya no pude pensar en nada en absoluto porque mi cerebro no
    estaba funcionando correctamente.
    La cabeza me daba vueltas. Era como si la habitación se estuviese meciendo
    de lado a lado, como si estuviera en lo más alto de un edificio altísimo y un viento
    muy fuerte balancease el edificio hacia atrás y hacia delante (esto también es un
    símil). Pero sabía que la habitación no podía estar meciéndose, así que debía de
    ser algo que estaba pasando dentro de mi cabeza.
    Rodé por la cama y me acurruqué hasta hacerme un ovillo.
    Me dolía el estómago.
    No sé qué pasó entonces porque hay una laguna en mi memoria, como si
    hubiesen borrado un trocito de la cinta. Pero sé que debió de pasar un montón de
    tiempo porque más tarde, cuando volví a abrir los ojos, vi que al otro lado de la
    ventana estaba oscuro. Y había vomitado, porque había vómito por todas partes,
    encima de la cama y en mis manos y en mis brazos y en mi cara.”

    Luego de este colapso, de enterarse que su madre estaba viva y que el asesino del perro era su padre, Christopher decide viajar a Londres para vivir con su madre.
    En el transcurso de su viaje utiliza su capacidad de observación detallista para poder completar su recorrido. Si bien tiene esta capacidad que le permite encontrar cosas que la gente normal no encontraría, hay que recordar que no tenia la capacidad de entender las emociones de la gente:
    “Pero la mayoría de la gente es perezosa. Nunca miran nada. Hacen lo que se
    llama «echar un vistazo», que es como chocar contra algo y continuar sin desviar
    el camino. Y la información en su cabeza es mínima. Por ejemplo, si están en el
    campo sería

    1. Estoy de pie en un campo que está lleno de hierba.
    2. Hay algunas vacas en los campos.
    3. Hace sol y hay unas cuantas nubes.
    4. Hay algunas flores en la hierba.
    5. Hay un pueblo a lo lejos.
    6. Hay una valla al final del campo y tiene una puerta.

    Y entonces dejan de darse cuenta de todo porque están pensando en alguna
    otra cosa, como «Oh, qué bonito es todo esto» o «Me preocupa haberme dejado
    encendido el gas en la cocina» o «Me pregunto si Julie ya habrá dado a luz».
    Pero si yo estoy de pie delante de un campo me doy cuenta de todo. Por
    ejemplo, recuerdo estar en un campo el miércoles 15 de junio de 1994, porque
    Padre y Madre y yo íbamos en coche a Dover para embarcarnos en un ferry hacia
    Francia, e hicimos lo que Padre llama «seguir la ruta pintoresca», que significa ir
    por carreteras secundarias y pararse a comer en un sitio con jardín, y yo tuve que
    parar para hacer pipí, y fuimos a un campo con vacas y después de que hubiese
    hecho pipí, miré el campo y me di cuenta de estas cosas
    1. Hay 19 vacas en el campo, 15 de las cuales son blancas y negras y 4 de las
    cuales son marrones y blancas.
    2. Hay un pueblo a lo lejos que tiene 31 casas visibles y una iglesia con una
    torre cuadrada y sin aguja.
    3. Hay caballones en el campo, lo que significa que en tiempos medievales era
    lo que se llama un «campo de bancales», y los habitantes del pueblo tenían
    cada uno un bancal para cultivarlo.
    4. Hay una vieja bolsa de plástico de Asda en el seto, y una lata aplastada de
    Coca-Cola con un caracol, y un pedazo largo de cordel naranja.
    5. La esquina noreste del campo es la más alta y la esquina suroeste es la más
    baja (yo tenía una brújula porque íbamos de vacaciones y quería saber
    dónde estaba Swindon cuando estuviésemos en Francia) y el campo está
    ligeramente doblado hacia abajo a lo largo de la línea entre esas dos
    esquinas, o sea que las esquinas noroeste y sureste están ligeramente más
    bajas de lo que lo estarían si el campo fuese un plano inclinado.
    6. Veo tres clases diferentes de hierba y flores de dos colores en la hierba.
    7. Casi todas las vacas están de cara a la colina.

    Y había 31 cosas más en esa lista de cosas de las que yo me di cuenta, pero
    Siobhan dijo que no hacía falta que las escribiera todas.”

    Una vez que Christopher concluye su viaje y llega a la casa donde su madre vivía con el señor Shears tiene un sueño peculiar. No es la primera vez que tiene este sueño pero demuestra su “enojo” por no poder comprender lo que piensan los demás:
    “[...] En el sueño, casi todo el mundo sobre la Tierra está muerto, porque han
    cogido un virus. Pero no es como un virus normal. Es como un virus de ordenador.
    Y la gente se contagia por el significado de algo que dice una persona infectada y
    también por el significado de lo que hace con su cara cuando lo dice, lo que
    significa que la gente también puede contagiarse viendo a una persona infectada
    en la televisión, lo que significa que se extiende por todo el mundo con muchísima
    rapidez.
    Cuando la gente se contagia, se quedan sentados en el sofá y no hacen nada
    y no comen ni beben, o sea que se mueren. Pero a veces tengo versiones
    diferentes del sueño, como cuando existen dos versiones de una película, la
    corriente y la Versión del Director, como Blade Runner. Y en algunas versiones
    del sueño, el virus hace que se estrellen con sus coches o que entren en el mar y
    se ahoguen, o que se tiren a los ríos, y creo que esa versión es mejor porque
    entonces no hay cuerpos de gente muerta por todas partes.
    Al final no queda nadie en el mundo, excepto la gente que no mira a la cara
    de otras personas y que no sabe qué significan estas imágenes

    y esas personas son todas personas especiales como yo. Y les gusta estar
    solas y apenas las veo nunca, porque son como okapis de la selva del Congo, que
    son una clase de antílopes muy tímidos y raros. […]”

    Lamentablemente, las cosas en Londres no funcionaron y Christopher, junto con su madre, debieron volverse a la casa del padre. Si bien Christopher seguía desconfiando rotundamente de su padre, ayudo bastante que le regale un perro, que lo vea de a ratos, y poder rendir su examen de bachiller en matemáticas de forma sobresaliente:
    “Y me dieron los resultados de mi examen de bachiller en Matemáticas, y
    saqué un sobresaliente, que es el mejor resultado, e hizo que me sintiera así


    Finalmente Christopher comienza a prepararse para el curso de especialización en matemáticas, ya que, si bien no podía comprender a los demás, si tenia en claro su forma de ser y sus objetivos.
    “Y fui a una librería con Madre y compré un libro llamado Curso de
    especialización en Matemáticas y Padre le dijo a la señora Gascoyne que iba a
    sacarme el curso de especialización en Matemáticas el año que viene y ella dijo
    «De acuerdo».
    Y voy a sacar un sobresaliente. Y dentro de dos años voy a sacarme el título
    de bachiller en Física también con sobresaliente.
    Y entonces, cuando haya hecho eso, voy a ir a la universidad en otra ciudad.
    Y no tiene que ser en Londres, porque a mí no me gusta Londres, y hay
    universidades en montones de sitios y no todas están en ciudades grandes. Puedo
    vivir en un piso con un jardín y un cuarto de baño adecuado. Y puedo llevarme a
    Sandy y mis libros y mi ordenador.
    Y entonces me licenciaré con matrícula de honor y me convertiré en un
    Científico”

    Para terminar con este ensayo, quiero recalcar la increíble fuerza de voluntad y la valentía de Christopher, que sin poder comprender al mundo, pudo lograr todos sus objetivos.|
    “Y sé que puedo hacer eso porque fui a Londres yo solo, y porque resolví el
    misterio de ¿Quién Mató a Wellington? y encontré a mi madre y fui valiente y
    escribí un libro y eso significa que puedo hacer cualquier cosa.”

      Current date/time is Fri Apr 26, 2024 10:03 pm